Persecución contra militantes sociales son rémoras del stronismo

Desde la Organización de Mujeres Campesinas e Indígenas Conamuri nos solidarizamos con el compañero Pedro Espinoza, comunicador y docente universitario, militante del Partido Comunista Paraguayo, quien, junto a su compañera Dora Meza, está siendo víctima del terrorismo de Estado, puesto que los propios policías que allanaron su domicilio y lo arrestaron ayer, 2 de diciembre, montaron un escenario artificial y torpe para incriminarlo y silenciar su lucha, que también es colectiva.

Este incidente gravísimo no puede pasar desapercibido. A Espinoza le plantaron evidencias en su domicilio para incriminarlo y para vincularlo con el grupo armado EPP, aprovechando la fortuita circunstancia de que su cuñada es una persona buscada por las fuerzas de seguridad por ser integrante activa del mismo.

Nos encontramos ante prácticas cada vez más violentas de criminalización de la lucha social y persecución política por parte de un gobierno criminal que atenta contra todos los derechos humanos y que se empeña en alimentar las rémoras del stronismo.

Por esta razón, nos sumamos a las voces de denuncia y llamamos a la solidaridad nacional e internacional para movilizarnos y buscar justicia en este nuevo escándalo protagonizado por la mafia infiltrada en las instituciones paraguayas.

¡Viva la lucha del pueblo!

¡No seamos neutrales! ¡Dictadura nunca más!